Balance de una tragedia rodeada de silencios

Estimados señores

Desde la Asociación de Familiares Afectados en las Residencias DomusVi de Alcoi y Cocentaina (AFADOMUS), queremos participarles, de forma resumida, del balance de los trágicos sucesos ocurridos en la residencia de Alcoi y las posteriores acciones que desde esta asociación se han llevado a cabo para conocer lo ocurrido e intentar mejorar las condiciones de vida de usuarios/as.

ANTECEDENTES

Entre 2018 y 2019 se registran tres brotes de gastroenteritis.

En 2019, un grupo de familiares denunciamos, ante las administraciones local y autonómica, la degradación del servicio en las residencias gestionadas por DomusVi en Alcoi y Cocentaina, en cuanto a la atención a los/as residentes. Destacamos como principal causa, pero no única, la falta de recursos humanos y el incumplimiento de unas ratios insuficientes.

Nada de lo que denunciábamos sirvió para corregir una realidad asistencial basada en el máximo beneficio económico en el menor tiempo posible.

El 4 de febrero de 2020, todavía como Plataforma de familiares, nos reunimos con el director general de Infraestructuras de la Conselleria de Igualtat i Politiques Inclusives. Le entregamos un listado con las deficiencias detectadas en los últimos meses. Nos encontramos con una actitud receptiva por parte del director general, quien se compromete a activar los recursos disponibles de la Conselleria para subsanar los problemas detectados. Quedamos citados en un plazo de tres meses para valorar la situación. El estallido de la pandemia, un mes y medio después, lo dejó todo en el aire.

LA PESADILLA

El 8 de marzo de 2020 comenzó la pesadilla para los ingresados y sus seres más queridos. Un total de 73 de ellos ya no pudieron ser vistos con vida por sus familiares.

La información sesgada y poco transparente por parte de la empresa gestora y el desamparo institucional, acentuaron la angustia, el dolor, la impotencia y la rabia.

El grupo de Whatsapp de los familiares se convirtió en uno de los pocos recursos donde compartir la poca información que nos llegaba, incluida la de los fallecimientos. De ese espacio común surgen numerosas interrogantes colectivas. Estas son algunas de ellas:

• ¿Con qué recursos humanos y materiales contaba la residencia el 9 de marzo de 2020 para hacer frente a una pandemia? Unos meses antes, sin pandemia, denunciamos la grave carencia de personal.
• ¿Cuánto tiempo transcurre desde que se detectan los primeros contagios en la residencia hasta que se comunican al Área de Salut y/o se toman las medidas adecuadas?
• ¿Por qué no se trasladaron al hospital los afectados? ¿Se podría haber salvado alguno de haber sido atendido en el Hospital? Recordemos que en la primera ola de contagio, nuestra área de salud tuvo una incidencia muy baja.
•  ¿Por qué se aplicaron sedaciones a algunos/as residentes sin consultarlo previamente a sus familiares y sin la autorización necesaria?
• ¿Bajo qué criterios médicos u organizativos, unas personas fueron atendidas por el personal sanitario de la UHD y otras por el personal sanitario de la residencia?
•  ¿Qué respuesta se dio desde la Conselleria de Sanitat ante la solicitud de ayuda y denuncia de graves anomalías que se hizo por parte del Jefe de Sección de la UHD?

Dieciséis meses después, seguimos buscando respuesta a estas y otras preguntas que ayuden a esclarecer uno de los episodios más trágicos ocurridos en nuestra ciudad. Continuamos teniendo claro que la pandemia en sí misma no basta para explicar la virulencia del contagio y la elevada tasa de fallecimientos en la residencia de Alcoi.

LAS CONSECUENCIAS Y EL SILENCIO

En mayo de 2020 y viendo los informes clínicos que desde el hospital se nos hacían llegar a los familiares, planteamos la necesidad de una atención urgente e integral para minimizar las secuelas de la situación vivida. Se dio un hecho que nos alarmó sobremanera: en un número importante de los informes clínicos, aparecía la palabra “desnutrición”. Conocimos el caso de una familia que sacó al familiar de la residencia ante el grave deterioro físico que presentaba.

Después de tanto tiempo aislados, encerrados en sus habitaciones y los/as más dependientes encamados, conocemos casos de personas que sufrieron deterioro cognitivo e incluso cuadros psicóticos.

Por profesionales que colaboraron en los meses en que la residencia fue intervenida por la Conselleria de Sanitat, supimos que a los/as residentes con mayor grado de dependencia no se les movía con la asiduidad necesaria. Algunos/as residentes presentaban ulceraciones por presión y en uno de lo casos se llegó a la amputación de un miembro.

Las fatales circunstancias que concurrieron en la residencia de Alcoi demandaban que se activara un protocolo de evaluación y atención a las personas supervivientes para conocer las secuelas que podían sobrevenirles. Según se recoge en el artículo 47 de la Orden de 4 de febrero de 2005, de la Conselleria de Bienestar Social, se regula “el régimen de autorización y funcionamiento de los centros de servicios sociales especializados para la atención de personas mayores”. Desde la asociación hicimos llegar al alcalde de Alcoi y al director general de Infraestructuras de la CIPI, la necesidad de coordinación para que se activara dicho protocolo.

Hasta la fecha desconocemos si se llegó a activar dicho protocolo. Más silencios.

Sabemos que en los últimos16 meses han pasado por la residencia de Alcoi hasta diez médicos/as diferentes. Entre el último trimestre de 2020 y el primer trimestre de 2021, la residencia ha estado, durante días y posiblemente semanas, sin esa figura profesional.

Fuimos conociendo cómo algunos/as profesionales, con años de experiencia laboral, abandonaban la residencia al no poder soportar la situación y las precarias condiciones de trabajo. Un número importante resultó afectado por COVID-19. Ellas y ellos también sufrieron las secuelas de la tragedia. Una vez finalizada la intervención de la Conselleria de Sanitat y durante bastante tiempo, la residencia de Alcoi contó con menos medios humanos que antes de la pandemia, obligando la dirección a jornadas de 12 horas de trabajo.

Estos hechos, junto con otros muchos que desconocemos en estos momentos, nos llevan a la certeza de que nuestros/as mayores no fueron atendidos como merecían y que se vulneraron y seguramente se siguen vulnerando sus derechos como personas y más cuando se han denunciado desde organizaciones e instituciones las irregularidades vividas en las residencias geriátricas (Médicos sin Fronteras, Médicos del Mundo, Amnistía Internacional, la comisaria de Derechos Humanos del Consejo de Europa, Dunja Mijatovic…)

RELACIÓN CON LA CONSELLERIA DE SANITAT UNIVERSAL Y SALUT PÚBLICA

El 19 de marzo de 2020, quizá demasiado tarde, la Conselleria de Sanitat Universal i Salut Pública intervenía la residencia de Alcoi ante los graves acontecimientos registrados. En aquel momento ya tenemos constancia de tres fallecimientos. Cuando se cerró el brote, en el mes de mayo, el resultado era de 73 residentes fallecidos y 1 fallecida usuaria del centro de día. La intervención por parte de la Conselleria no propició una mayor información y transparencia, todo lo contrario.

En sus comparecencias en la televisión pública valenciana, la consellera Ana Barceló se refirió en tres ocasiones a los familiares de DomusVi. La primera para decir que no le constaba que ningún familiar hubiese intentado ponerse en contacto con ella; la segunda para aclarar que la competencia de transmitir información a los familiares era de la empresa gestora y la tercera para señalar: “no entiendo que más información necesitan los familiares”. Si no tenía intención de ayudar a los familiares, tampoco hacía falta refugiarse en una actitud que podía interpretarse como cínica, mezquina e inhumana.

El 2 de junio de 2020 se remite a la Conselleria de Sanitat un escrito de Dictum Abogados, en representación de la asociación de familiares, con requerimiento de información. La respuesta se centró en la recopilación de documentación (resoluciones, protocolos, etc.) emitida por administraciones competentes de ámbito autonómico o estatal. Ni una sola referencia al escrito que remitió el jefe de la UHD al Departamento de Salud, en el que pedía ayuda y denunciaba la “descoordinación absoluta dentro del servicio médico de la propia residencia”, la “ínfima información y de mala calidad por parte de DomusVi”, las “continuas injerencias en los tratamientos pautados” y el “incumplimiento sistemático de las normas de aislamiento de pacientes covid”, entre otros.

Cuesta creer que ante la solicitud del jefe de la UHD y la gravedad de la situación, no se diese una respuesta por parte de los responsables del Departamento de Salut.

Tampoco hay ninguna referencia a los informes de las inspecciones realizadas por la Conselleria y que, según Ana Barceló, se remitían diariamente a la Fiscalía.

De momento Ana Barceló ha decidido no facilitar ninguna información relevante a los representantes legales de los familiares. Se ha impuesto el silencio.

RELACIÓN CON LA CONSELLERIA DE IGUALTAT I POLITIQUES INCLUSIVES

Al inicio de la pandemia también recurrimos a esta Conselleria para intentar conseguir información sobre lo que ocurría en el centro. Aquí sí encontramos respuesta: la información sobre la situación sanitaria del centro es competencia de la Conselleria de Sanidad. Otra vez las “malditas” competencias y de nuevo el silencio.

Como se hizo con el resto de administraciones, a la Conselleria de Igualtat se le trasladó, desde Dictum Abogados, requerimiento de información. La fecha de salida fue el 2 de junio de 2020 y la de respuesta de la Conselleria, 7 de abril de 2021. A imagen y semejanza de la contestación de Sanitat, la respuesta es un compendio de instrucciones y resoluciones de ámbito autonómico y estatal, pero sin ofrecer ningún dato concreto que ayude a entender lo ocurrido en la residencia de Alcoi.

La vicepresidenta y consellera de Igualtat y Polítiques Inclusives, Mónica Oltra, acusó, en un medio de comunicación, a la empresa gestora de la residencia de Alcoi, de no comunicar el brote de COVID-19. Si es así ¿por qué desde el Govern o la Conselleria no se activan las pertinentes investigaciones? ¿por qué optan por la inacción? Se vuelve a imponer el silencio.

De la cacareada propuesta de reversión de la gestión de la residencia de Alcoi, que tantos titulares ocupó, ya no hemos vuelto a tener ninguna noticia más.

El pasado 23 de abril, enviamos al director general de Infraestructuras de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas, un escrito con las carencias e incumplimientos por parte de la gestora de la residencia, asimismo le comunicamos nuestro interés en mantener una reunión para tratar diferentes asuntos. Estamos a la espera de su respuesta. Más silencio.

Nos da la impresión que ambas Consellerias no consiguieron unos niveles de colaboración y cooperación deseables ante la situación de gravedad que se daba en la residencia de Alcoi.

GESTIONES CON LA FISCALÍA PROVINCIAL DE ALICANTE

El 8 de julio de 2020 presentamos escrito, como perjudicados, ante la Fiscalía Provincial de Alicante solicitando personación en las Diligencias Pre-Procesales número 31/2020 y solicitando se nos dé traslado de cuantos documentos consten en las actuaciones y se nos informe de las actuaciones venideras.

Hasta la fecha no hemos recibido ningún tipo de información de dicha Fiscalía.

DOS PREGUNTAS AL AYUNTAMIENTO DE ALCOI

El Ayuntamiento es la administración con la que hemos tenido más contacto, tanto con el gobierno como con la oposición. Aunque sabemos que no tiene competencias en la residencia, es la máxima referencia de la política y la representatividad en nuestra ciudad. Y a él acudimos buscando respuestas a lo que estaba pasando en la residencia. Esperamos que nunca un ciudadano o colectivo de nuestra ciudad vuelva a sentir la sensación de desamparo, abandono o incluso peor, de engaño, que sentimos en los primeros momentos. Luego se pidieron disculpas, pero conviene tenerlo presente por una cuestión de salud y bienestar democrático. El silencio también duele.

Es de justicia reconocer las muestras de apoyo y propuestas que hemos tenido de los diferentes grupos políticos. Y así consta en los diferentes acuerdos tramitados como “declaración institucional”.

Pese a las numerosas interactuaciones que hemos tenido, conocidas porque han sido compartidas, hay dos cuestiones que, a pesar de los esfuerzos realizados, quedan pendientes:

•  El Ayuntamiento de Alcoi aprobó en el Pleno de mayo de 2020, instar al Ministerio Fiscal a que “se lleve a cabo la investigación exhaustiva y específica que proceda, en pos de la aclaración definitiva de lo ocurrido y, en su caso, de su remisión a la autoridad judicial para la tramitación del procedimiento oportuno que depure las responsabilidades a que hubiere lugar”.
• En el Pleno del 30 de julio de 2020, el alcalde Toni Francés manifestó su confianza en que la investigación de Fiscalía resolviese las cuestiones planteadas sobre lo sucedido en DomusVi Alcoi, “la ciudad y los familiares merecen saberlo”.

Hoy, 14 meses después, preguntamos:

• ¿Puede el Ayuntamiento de Alcoi informar de la situación en que se encuentra la investigación solicitada?
•  ¿Tiene previsto el Ayuntamiento de Alcoi emprender alguna acción concreta ante la demora de la investigación solicitada?

Quedamos a su disposición para aclarar cualquier duda que pueda derivarse del presente escrito o ampliar la información que por motivos de espacio no hayamos podido reflejar de manera conveniente.

Celebraríamos que este Ayuntamiento creara una comisión informativa que dé cabida y protagonismo a otras voces que ayuden a conocer las circunstancias que provocaron una de las mayores tragedias ocurridas en nuestra ciudad.

Reciban un cordial saludo.